Mario Calvo Román

Biografía
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Mario Calvo Román es hijo del Bajabonico occidental, nació en la ribera del río Cabía... es un hombre de la salud biológica, de la salud social, algo menos que la espiritual, pasó la mayor parte de la suya atendiendo a la ajena. Por ser un humanista solidario, haciendo suya la frase Martiana “Patria es humanidad”, es Bolivariano, Hostosiano, Martiano y Duartiano. Su obra social la ha desarrollado en los entornos y contornos rurales. En el viejo distrito nacional, en los bateyes de la zona norte de Santo Domingo, tales como San Joaquín, Tosa Reventón, Ceiba doce, El Ocho, Mata Mamón, y unas treintenas de parajes de Villa Mella y La victoria.
En Guanuma y la hacienda Estrella los Castillo, dejó como en otros de 37 parajes sin mencionar, en esas jurisdicciones, parte de su salud económica, pero crecía la social y política.
Calvo Román inició su carrera de servicio en el penal de La victoria, luego de haber estado en Santiago y en la frontera, en los atardeceres de la tiranía, como enfermero en el hospital de la dotación militar, luego policial, de esa prisión compleja y delicada. Esa es parte de su obra humanística, de servicios para los humildes y los excluidos, sus bienes y sus propiedades fueron absorbidos por las acciones sociales inclusive la política.
Fue delegado municipal en La victoria en 1966. Hoy como ayer combatiente cotidiano, entrega a la sociedad las páginas tituladas - “Reseña de la Guerra de Abril o Testimonio de un Constitucionalista” sin pretensiones igualatorias y mucho menos compararse… pero sí ofrece un aporte al desarrollo social de las décadas, de las generaciones, últimos atardeceres del siglo 20 y del alba del 21.
Durante la guerra fría vio morir a numerosos combatientes que como él enfrentaron las tropas golpistas fuente y brazo derecho de los Abueliyanquis a quien como un dique resistieron en las calles de ciudad nueva, en el hospital padre Billini. En 1982 ocupó el cargo de Alcaide de La Penitenciaría Nacional, llegó cargado de metas y objetivos muy humanos, que por falta de apoyo gubernamental y de los sectores no gubernamentales, no pudo conseguir ---satisfactoriamente para él.
De haber hallado apoyo, lo que en apariencia parecían sueños eran iniciativas, pero la procuraduría general de la república rechazaba a esos románticos… así lo miraban las autoridades del área… realizó las que pudo, mejorando lo humano, la comida, dormitorio, las visitas, eliminó la cárcel de mujeres, creó la biblioteca para lectura de los prisioneros y de los seguridad del establecimiento carcelario. Hizo cambios que perjudicaban los proxenetas y traficantes de penal, en beneficio de los fines regenerativos del penal.
Produjo las condiciones y facilidades para celebrar el matrimonio, el primero en toda la historia carcelaria, entre Jaime Pérez Sosa y su compañera Mayra, recibió del “Gordo De La Semana” que dirige el señor Freddy Veras Goico, “Certificado de Reconocimiento”.
Creó la panificadora e higienizó las celdas donde torturaron y mataron a varios combatientes, como Rafael Pérez Guillén. En ese sentido fue una luz y noria a lo largo de todo el camino… sembró afecto y mucha esperanza entre sus ahijados, es por eso, que la cosecha de espiritualidad lo recompone cargando sus baterías humanísticas de individuo socialmente universalista y solidario. Es por eso que genera acciones combativas desde la salida del cortijo Guarín, allá en los perímetros de Estero Hondo y Maimón, al norte de la república. Esas energías les sirvieron para defenderse de los corruptos usureros y agiotistas del poder hipotecado, haciendo siembras éticas en los surcos y privilegios anacrónicos e hipócritas.